Lo que más valoran nuestras familias
¿Por qué elegir a una madre de día para el cuidado de tu bebé? Si pudieras preguntarle a las familias que confían en nosotras, te dirían que lo que más valoran es el amor y la atención personalizada que ofrecemos.
¿Qué significa esto? Por supuesto que quieres que tu bebé reciba el mejor cuidado y atención posible cuando estás trabajando. En el hogar de una madre de día, ofrecemos precisamente eso: una atención personalizada y un ambiente acogedor y familiar. Con solo 3 o 4 niños por hogar, cada criatura recibe la atención que necesita a su propio ritmo. Con este enfoque reconocemos que cada bebé es único y que sus necesidades pueden variar de un día a otro.
Un ambiente familiar y acogedor es fundamental para la felicidad y el bienestar emocional de cada niño. A diferencia de los centros educativos y de cuidado infantil, aquí los pequeños se sienten como en casa.
Además, se establecen relaciones muy valiosas entre las familias y las madres de día, lo que no solo beneficia el desarrollo de los niños y niñas, sino que también se crea una comunidad fuerte y unida. Esto implica trabajar de manera colaborativa con los padres y madres para asegurarnos de que se satisfacen adecuadamente las necesidades del bebé.
La atención personalizada se implementa en actividades como la alimentación, el cambio de pañales cuando sea necesario, el juego y la interacción constante con el bebé, la lectura de cuentos y la estimulación sensorial. En los hogares de las madres de día existen las rutinas, pero éstas están al servicio los niños y niñas del nido, y no se imponen si los ritmos y las necesidades cambian.
Y qué decir de los beneficios de la atención personalizada en el cuidado de los bebés, incluyendo el desarrollo de un vínculo muy estrecho entre el bebé y su madre de día, la estimulación del desarrollo físico y cognitivo de cada bebé y la reducción del estrés tanto para el bebé como para su madre de día.
En nuestros hogares, creamos un ambiente seguro y amoroso para tu peque. Estamos presentes en todo momento, los abrazamos cuando lo necesitan, les proporcionamos un ambiente tranquilo y respondemos rápidamente a sus necesidades con empatía y afecto. Así es como creamos un clima seguro y amoroso para tu bebé cuando tú no estás.